La oficina moderna: espacio para la productividad

Por Evelyn Chacón P.
Revista OC Magazine
#3 A o 1
Julio de 2007

Los colores tenues, el aluminio, el vidrio, los materiales sintéticos y las maderas claras o color chocolate son algunas de las características de la decoración que envuelve a la oficina actual. Espacios que lejos de crear sensaciones frías evocan paz, ayudan con el rendimiento de las empresas y disminuyen los índices de estrés de sus empleados. Con todas estas ventajas seguramente la tendencia minimalista llegó para quedarse en el lugar de trabajo.

La oficina representa el espacio donde más tiempo se está durante el día, inclusive más horas que en el propio hogar. Así que resulta una buena idea de parte del jefe prepararlo para que sus empleados estén a gusto, sobre todo si el nuevo ambiente puede subir la productividad y bajar el estrés.

Atrás quedaron los espacios para trabajar recargados con grandes escritorios de pesadas maderas y de patas curvas y puertas cerradas por doquier con carteles especificando cargos. Ahora, la tendencia minimalista ofrece la oportunidad de representar profesionalismo y seriedad desde otra perspectiva.

Una de las principales características de estos espacios es el color predominante de las paredes, la tendencia invita a usar colores básicos como el beige, blanco o crema. Claro está, siempre habrá la libertad de utilizar detalles en rojo para potenciar la energía y estimular el lado creativo del equipo; azul, violeta y verde para crear tranquilidad (ideales para usar en salas de reuniones) o en naranja que puede ayudar con la seguridad y el dominio de uno mismo.

Otras de sus particularidades del estilo minimalista son las líneas simples en el mobiliario, los pocos accesorios y los grandes ventanales o extensas zonas iluminadas para dar la necesitada sensación de amplitud; es así que las oficinas lucen cada vez más abiertas, haciendo que las personas de jerarquía cierren su espacio con vidrios o tabiquería en vez que con concreto y madera.

Los muebles que el mercado ofrece para complementar el estilo minimalista en los lugares de trabajo tienen la ventaja de que son a la medida de las necesidades espaciales, pues muchos de ellos son modulares y pueden diseñarse en vertical; es natural entonces crear nuevas estaciones de trabajo rápidamente sin incomodar al resto del personal. Los materiales más usados son el aluminio, la fórmica que emula maderas de colores claros o chocolate y la melamina (tipo de plástico empleado para hacer superficies duraderas y versátiles).

Influencia de otras tendencias
El estilo Loft y el Lounge se están haciendo presentes con más frecuencia en la oficina moderna. El primero al dejar que las tuberías de aire acondicionado y de electricidad sean parte de la decoración de los techos, permitiendo que las ventanas estén desprovistas de cortinas o persianas y dejando atrás las alfombras para suplir con cemento pulido o madera flotante. El segundo, agregando accesorios distintivos de otras décadas y ofreciendo un espacio con puff y grandes cojines para que los potenciales o actuales clientes disfruten de una buena música o revista mientras esperan ser atendidos.

Se debe recordar al momento de redecorar o amoblar una oficina que más allá de los objetivos promocionales, el estilo y la decoración de esos espacios hablan de la filosofía y visión que la empresa desea proyectar. Sin embargo, también hay que tener presente que las compañías –sin importar su tamaño o sector económico- son ante todo las personas que laboran para ella y palabras como ergonomía, comodidad, luz y flexibilidad en un lugar donde se pasa el mayor tiempo del día es causa suficiente para hacer que el empleado ofrezca lo mejor de su experiencia y profesionalismo.

El sillón correcto
Se ha demostrado clínicamente que el tipo de silla usado por una persona durante más de ocho horas diariamente puede acarrear en problemas no sólo para su columna y músculos de la espalda sino también para las piernas y pies, además de muestras de cansancio más expeditas.
Por ello es imperativa la necesidad de escoger sillas con los soportes y tamaños adecuados. Las características dependerán no sólo de la decoración del espacio en el que estará ubicada y de los colores promocionales de la empresa, sino también de quién la usará.

Las sillas utilizadas por el grupo gerencial y por el operativo suelen ser distintas. La diferencia entre ambas se debe a que el primero está conformado por usuarios que tienen la posibilidad de estar un poco más relajados físicamente ya que realizan actividades menos constantes aunque más variadas. Estos asientos habitualmente son de una sola pieza (respaldo y asiento integrados) y ofrecen el sistema “basculante”, lo que permite que se balancee toda la estructura al mismo tiempo.

Por otro lado, las sillas usadas con frecuencia por el grupo operativo son de menor tamaño que las gerenciales y frecuentemente tienen el asiento separado del respaldo. Lo ideal es que cuenten con el sistema de “contacto permanente” en el apoyo para la espalda, el cual permite al usuario regular el ángulo y fijar la posición cómoda e ideal, o dejar que el respaldar acompañe los movimientos del cuerpo, teniendo así un soporte constante.

También es importante escoger mobiliario que permita al usuario ajustar la altura, puesto que es preciso que las piernas descansen adecuadamente. En el caso del equipo que trabaja con computadoras, las sillas con apoyabrazos facilitan el acceso al teclado, al mouse y al correcto ángulo de visión del monitor. Según diversos estudios en ortopedia y ergonomía, la posición ideal para este tipo de asientos es de 98°.

Las proyecciones en cuanto a las tendencias en esta área indican que en un futuro cercano las sillas tendrán cada vez menos relleno, pues esto ayudaría a mantener una postura correcta.